Para algunos, el control de la freidora de aire es una asignatura pendiente. No siempre la culpa es del aparato, como con todo, no basta con tenerla hay que saber usarla... Controlar la potencia y los tiempos de una airfryer requiere su maña, eso sí, una vez que se domina la máquina, la comida sale más sabrosa que nunca.
Antes de encenderla por primera vez
Nada más abrir el paquete, verás que incluye varios accesorios aparte de la propia máquina: la rejilla, la bandeja o la canasta es indispensable a la hora de utilizar la freidora de aire, el primer paso es lavarlos con cuidado. Colócala en una superficie lisa, resistente al calor y a unos 20 centímetros de la pared, de forma que, cuando expulse el aire caliente por detrás, haya espacio suficiente para que este fluya y no se recaliente. Cuando todos los accesorios se hayan secado, introdúcelos en la freidora de aire. Para eliminar el “olor a nuevo”, enciende y programa en el modo 'precalentar' durante aproximadamente diez minutos, como si fueses a cocinar algo. De esta forma se eliminará el olor a electrodoméstico recién comprado. Si tu freidora de aire no incluye la opción de precalentar específicamente, siempre puedes mantenerla encendida durante 5/10 minutos (dependiendo de tu airfryer) a temperatura de 180/200º C. Recuerda también leer las instrucciones, que están para algo.
A la hora de cocinar
1. Utiliza un spray de aceite para que tus recetas queden más sabrosas y crujientes. Con espolvorear una o dos veces es más que suficiente. La freidora de aire necesita un poco de aceite…
2. Incluye siempre la rejilla en la cesta. Puede que tu cesta ya lleve incorporada la rejilla o puede que sea un accesorio suplementario; sea de la forma que sea, asegúrate de que siempre está colocada sobre la canasta, de forma que el aire circule con libertad por la comida. Esa es la clave para cocinar bien con ella y sacarle todo el partido. Además, evitarás que los alimentos se empapen del poco aceite o los jugos que caen al fondo.
3. Precalienta siempre el robot. Es la mejor forma de garantizar que el resultado quede tan crocante y apetecible como imaginas. Si metes los productos fríos y en frío, el resultado no terminará de ser óptimo y se perderá parte de la textura crujiente que tanto buscas.
4. Puedes abrir y cerrar la freidora durante el cocinado para comprobar el estado de los alimentos o removerlos. Para el segundo caso, recuerda utilizar unas pinzas anchas específicas, evitando que el revestimiento antiadherente de la freidora se estropee. También podrás usar esas mismas pinzas para sacar el resultado final de la freidora de aire. El propósito de la freidora es reducir en un 70% el porcentaje de grasas de un plato, reduciendo simultáneamente el volumen de aceite necesario para elaborarlo. Por tanto, es necesario el uso de pinzas anchas para sacar y colocar en los platos los alimentos.
5. Agitar la canasta mientras cocinas es básico para la inmensa mayoría de los ingredientes que cocinas. De esta forma conseguirás que la comida se cocine de manera uniforme.
6. Procura no cocinar nada con salsa, ya que al final goteará por la rejilla hasta el fondo de la canastas y se quemará, estropeando el plato.