Si hay un plato invernal por excelencia ese es la sopa, nada resulta más reconfortante que darle una cucharada a una bien calentita cuando aprieta el frío –salvo si eres Mafalda-.
BENEFICIOS: Tomar sopa tiene múltiples beneficios, ayuda a no engordar, nos ayuda a comer más lento y es saciante, es perfecta para todas las edades, combate el resfriado o por lo menos planta cara a los problemas respiratorios, nos ayuda a mantener una buen presión sanguínea e incluso algunas ayudan con la libido.
TIENE TRUCO: La sopa ha sido una fuente de nutrición y comodidad durante siglos, algunas evidencias arqueológicas datan la primera sopa en el 6000 a. C. y se cree que se preparó de hipopótamo. Aunque aparentemente parezca que consiste en añadir ingredientes al agua, hacer una buena sopa tiene sus trucos.
SORBER AUMENTA EL PLACER: Uno de los grandes inconvenientes de tomar la sopa acompañado es el ruido que producimos al sorber, pues ya sabemos que se considera de mala educación. Hace unos años un estudio franco-británico afirmó que "sorber" le daría un mejor sabor a nuestra comida. Vamos, que no estamos sacándole suficiente partido a nuestro sentido del gusto y que quizás deberíamos de comenzar a imitar a las culturas asiáticas y empezar a hacer ruido cuando comemos. Según la tradición oriental, en ciertas zonas sorber indica cuánto amas tu comida: cuanto más fuerte y entusiasta, mayor es tu cumplido para el chef. Y así lo dice la ciencia: comer mientras se hace ruido aumenta el disfrute de la experiencia.
En estos días puede ser un buen momento para dejarnos llevar por el placer de sorber y comprobar si el sonido agudiza el resto de nuestros sentidos.