Aunque la caída del pelo es algo normal, hay que reconocer que cuando el número de cabellos que encontramos en el desagüe de la ducha es muy elevado se dispara la taquicardia. Los expertos aseguran que la caída estacional no debe preocupar, de hecho la pérdida de entre 50 y 100 cabellos diarios es normal. Eso sí, debemos estar atentos porque si la cifra supera los 100, el cabello no puede reemplazarse con suficiente rapidez, por lo que para paliar el daño recibido en el cabello durante el verano y prepararlo para el otoño, no está de más tomar medidas para fortalecerlo.
FORTALEZA: Tener un pelo más fuerte depende de las proteínas y los puentes de unión que componen la fibra capilar y en ese sentido, es necesario que llevemos una dieta en la que no nos falten proteínas, vitaminas y minerales para mantener las funciones del cabello y del cuero cabelludo. Además, podemos poner en marcha ciertas acciones que pueden ayudar a reforzar el cabello como: cortar y sanear el cabello, evitar los cambios bruscos de temperatura (minimizando el uso de herramientas de calor), espaciar los lavados para no dañar el cuero cabelludo, utilizar productos que hidraten y nutran en profundidad la fibra capilar, dar un masaje en el cuero cabelludo para activar la circulación y oxigenar los folículos (sin frotar).
ALIADOS: Pero lo realmente fundamental para una buena salud capilar es recuperar los buenos hábitos alimenticios. Una dieta equilibrada y rica en vitaminas A, B, C y B12, junto con minerales como hierro, zinc, cobre, biotina y ácido fólico, ayuda a fortalecer el pelo. Alimentos como las frutas (kiwi, fresas, naranjas), verduras de hoja verde, cereales, carnes rojas, mariscos y frutos secos son esenciales para proporcionar estos nutrientes.
COMPLETOS: En el caso de que todo esto no sea suficiente o queramos garantizar que sí o sí estamos recibiendo estos nutrientes, los complementos pueden ayudar a nuestro organismo combinando una dosis alta de estos nutrientes que pueden contribuir a la formación de la queratina (fundamental para la recuperación de la estructura del cabello y de las uñas.)
