ALGUNAS CLAVES PARA HACERLO BIEN:
Apunta buenas maneras. Antes de empezar a comer, di la palabra “itadakimasu” (pronunciado “i-tadai-kimás”) para desear buen provecho a tus compañeros de mesa, y lávate las manos con una toalla húmeda u “oshibori”.
Sigue un orden para comer. No empieces a comer sushi a lo loco. Idealmente, debes empezar por el pez que tenga un sabor más ligero y acabar con los sabores más fuertes. Degusta primero los de color blanco y luego los rosados y rojos. Esa misteriosa pieza con tortilla, es para los postres.
Puedes comerlo con las manos. ¿Tanto tiempo invertido en aprender a usar palillos para esto? Pues sí, la manera tradicional de comer sushi es con las propias manos...
Con buena educación: Si después de tanto tiempo ensayando te niegas a usar las manos y decides pedir unos, nunca los frotes. Hacerlo, aunque sea para quitar trocitos de madera, es considerado de muy mala educación. Es como si le dijeras al chef: “qué palillos tan baratillos”.
No pases la comida. Si quieres dar algo de tu plato a otra persona, pásalo con las manos. Hacerlo con los palillos recuerda a la tradición de trasladar los huesos de difuntos. Tampoco los dejes nunca en vertical, pinchados sobre la comida. Eso sólo se hace con el incienso en los entierros.
El wasabi siempre va dentro del sushi, no aparte. Aunque tienes la opción de pedirlo sin wasabi, te mirarán un poco raro si lo haces. La pasta verde que conocemos, además, es una versión de rábano picante más barato que la raíz original, que se sirve en tiras.
Elimina el efecto picante. Si te señalan al wasabi y hacen la típica broma de “come esto verde, que está muy bueno”, prueba a respirar por la nariz mientras tu boca está ardiendo, y verás como desaparece el picante en cuestión de segundos.
El jengibre tiene sentido… Aunque casi nadie entiende muy bien por qué está allí, el jengibre tiene la función de hacernos disfrutar más de las piezas de sushi. Al cambiar de pescado, puedes comer un poco de esta planta para eliminar el sabor y empezar “desde cero” con los nuevos sabores.
No pongas todo el sushi dentro de la salsa de soja. Si impregnas demasiado la pieza, el pescado pierde sabor. Sólo hay que sumergir un poco el lateral (es decir, lo giras y pones el pescado hacia abajo) y jamás mojar el arroz.
El nigiri se come de un bocado. Eso de partir el sushi por la mitad está muy mal visto. Intenta comerlo todo de golpe, aunque tengas que abrir mucho la boca. Como mucho, puedes hacer un par de bocados, sin dejar nunca uno de los trozos sobre el plato.
No dejes el plato vacío. Si no dejas ni un grano de arroz, el cocinero pensará que no ha hecho suficiente comida. Así que, o dejas un poco, o felicitas al maestro y le invitas a un sake.
Ahora que ya tenemos todas las claves y sabemos hacer lo correcto toca disfrutar al estilo nipón nipón. Feliz Día del Sushi.